lunes, 22 de octubre de 2012

Me pasó un tsunami por encima

Mi abuela tuvo un acv. Mi adorada abuela, la luz de mis ojos, la que me ilumina la vida con su sonrisa y su voz dulce.
La mejor abuela del mundo, la que da todo por sus nietos y bisnietos. La persona que más amada me hizo sentir en esta vida.
Está en terapia intensiva, por ahora peleandola. Aunque sé que ya no quiere más...el sábado (cuando fue esto) me apretaba la mano y cerraba los ojitos como diciendome: "ya está"
No puede hablar, tiene la mitad del cuerpo casi paralizado y todo esto es una reverenda cagada.
No me digan que me aferre a Mateo, que tengo que seguir por el y que el me necesita. Todo eso yo ya lo sé.
Yo necesito que alguien me diga como calmo este dolor que me quema el pecho, como hago para respirar cuando mi garganta se cierra, como le digo a mis lágrimas que dejen de brotar todo el tiempo.
Mi cuerpo se revela, ayer me desperté con resfrio, tos y fiebre. Ni siquiera puedo ir a verla por miedo a contagiarla y que le haga peor.
Ojalá la próxima vez que escriba sea para decirles que está mejor, que se está recuperando y que lentamente va a salir adelante.
Pero hoy, para mí, el mundo es gris y se ve a través de las lágrimas.

1 comentario:

Ann dijo...

Te mando un beso y un abrazo fuerte fuerte, Mai... No puedo decirte nada más :(